Origen: Europa, noroeste de África y sudoeste de Asia, creciendo, en función de la climatología particular de cada lugar, en
diferentes hábitats: de este modo, si en el norte de Europa crece en bosques y bordes de caminos, en la zona mediterránea se encuentra asociado a arroyos, ríos y zonas que guardan una alta
humedad todo el año.
Porte: Frondoso y abierto.
Desarrollo: Puede alcanzar hasta los 6 o 7 metros de altura.
Follaje: Caduco. Hojas pecioladas, dispuestas en pares opuestos, con el margen serrado.
Crecimiento: Medio.
Rusticidad: Soporta bien las heladas y los fríos intensos.
Tipo de suelo: Suelos húmedos. No es exigente en cuanto a la fertilidad del terreno pero precisa disponer de humedad constante
para desarrollarse.
Exposición: Sol o media sombra.
Usos: En el jardín o en la huerta se suele emplear para la formación de setos informales o pantallas vegetales, ya sea en
solitario o asociado a otras especies, favoreciendo la presencia de avifauna, tanto por sus frutos otoñales como por el refugio que ofrece a diversas paseriformes durante la temporada
estival. En la primavera nos regalará una hermosa floración, con grandes corimbos terminales, que serán polinizados por diversas especies de abejas y avispas. Recibe además una gran variedad
de usos como planta medicinal y culinaria.