La facilidad de cultivo ha convertido esta especie en una popular planta de interior, aunque también puede vegetar al aire libre en climas cálidos ya que soporta hasta -2 °C.

Cultivada en interiores necesita luz media, en sombra pueden llegar a perder la banda blanca que la caracteriza y si se ubica al sol directo puede quemarse.

Requiere humedad media, es conveniente pulverizar agua sobre las hojas. Tolera la escasez de agua debido a que la almacena en su grueso sistema radicular. Sin embargo, en verano se debe aumentar la frecuencia de riego.

Se puede trasplantar a una maceta mayor 2 veces al año debido a su rápido crecimiento.